valldemossa
Enclavado en la Sierra de Tramuntana, declarada Patrimonio de la Humanidad en la categoría de Paisaje Cultural, este pueblecito de calles empinadas flanqueadas por casas de piedra y macetas con flores inspiró a escritores como Gaspar Melchor de Jovellanos, Rubén Darío o Santiago Rusiñol. Gran parte de su historia local se concentra en La Cartuja, cuyas celdas acogieron el amor de Frederic Chopin y George Sand. El municipio se abre al mar por el Puerto de Valldemossa, con rincones vinculados al Archiduque Luis Salvador, como Miramar o S’Estaca.
Deìa
A la sombra de la montaña del Teix se encuentra Deià, pueblo especialmente conocido gracias al aura cosmopolita aportada por artistas de todo el mundo. En Dèià encontramos tres zonas: Es Puig, coronado por la iglesia y el cementerio; la parte media, a lo largo de la carretera de Valldemossa a Sóller; y Es Clot, zona baja y núcleo original de la población. Con 5 km de costa escarpada, el municipio acoge las playas de Cala Deià y Llucalcari, y los paisajes de Sa Foradada y Son Marroig.
Campos
Fundado en 1300 por el rey Jaime II, Campos fue siempre un pueblo agrícola y ganadero. Los huertos producían, los molinos llenaban los aljibes y estanques y no faltaba el pasto para las vacas productoras de leche. Con tres núcleos de población —Campos, Sa Ràpita y Ses Covetes— es el primero el que está más arraigado y cuenta con más población. Las playas y sus torres de defensa son el mejor de sus patrimonios.
felanitx
Hay constancia de asentamientos humanos en Felanitx desde la Edad de Bronce, cuando este municipio era famoso por la producción de cerámica y alfarería en el siglo III a.C.; más adelante, fue conocido por la producción de vino y brandy, y de hecho, hoy en día, Felanitx se erige como el centro de la segunda región vinícola más grande de Mallorca. Destacan sus montañas, donde se ubican el Castillo de Santueri y el Santuario de San Salvador, y no faltan enclaves marinos, de los que destaca sobre todo el puerto natural de Portocolom.
Costix
Localidad de interior ubicada en el centro de Mallorca, conserva muy bien el aspecto de antaño con la mayoría de casas construidas con piedra de la zona. Su centro está muy bien cuidado, con la iglesia de la Mare de Déu de Costitx como referente. El cultivo de viña y cereal tiene especial importancia para la economía de este pueblo, cuya parada obligatoria nos lleva hasta el santuario talayótico de Son Corro, donde se hallaron cabezas de bronce de toros conocidas como “caps de bou” actualmente conservadas en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid y que son el símbolo identificativo de esta localidad.
consell
Consell es uno de los municipios de la isla más ricos por su producción agrícola; de hecho, la viña es el elemento más característico: ya en el año 1990 ocupaba más del 3% de toda su superficie. Uno de sus principales encantos es la iglesia, además de la posesión de Can Ribas, dentro del casco urbano. Entre los elementos arquitectónicos a destacar está el Pont Trencat, medieval según la tradición, que se halla en el Camí del Raiguer, en la partición con el término de Alaró.
santa maria
Santa María es una localidad de grandes contrastes, con sus pintorescas casas de piedras y la tranquilidad de un típico pueblo mallorquín, núcleo de artesanos y enólogos isleños. Sin embargo, los domingos se transforma gracias a su mercado, uno de los más impresionantes de la isla. Entre sus visitas imprescindibles, Can Conrado y su claustro —antiguo convento de la orden de los mínimos, que data de los siglos XVII y XVIII— y la plaza de la villa, un lugar tranquilo rodeado de antiguos edificios de los siglos XVII, XVIII y XIX, incluyendo el ayuntamiento.
artà
La combinación de patrimonio, tradición, modernidad, naturaleza y turismo hacen de Artà una visita obligada. Situado en la zona noreste de Mallorca, Artà cuenta con una reserva marina y un Parque Natural. Además, destaca la extraordinaria riqueza de elementos patrimoniales del municipio, que son el reflejo de su historia y cultura: playas de ensueño como Cala Torta o Na Clara, preciosas rutas de senderismo por el Parque Natural de Península de Llevant, o lugares tan interesantes como Sant Salvador o el poblado talayótico de Ses Païses.